Desde OLAZ os traemos una tendencia que se está abriendo paso en el mundo del interiorismo: los suelos mixtos o suelos combinados. Esta técnica consiste en la combinación de diferentes materiales para crear un revestimiento con un efecto decorativo único y original. Así, conseguimos alejarnos de los suelos lisos y aburridos, aportando a nuestro hogar creatividad, originalidad y un estilo propio.

La principal ventaja de los suelos mixtos es la posibilidad de combinar diferentes materiales, colores, formas y texturas para crear pavimentos dinámicos que no dejen indiferente a nadie. La combinación más extendida, sin duda, es la de madera con gres o baldosa hidráulica, aunque podemos ampliar el abanico de posibilidades mezclando dos tipos distintos de gres, gres con baldosa hidráulica, esta última con microcemento, o este mismo con madera, sin tener en cuenta la forma, el color o el diseño del material, por lo que las opciones pueden ser infinitas.

Además, podemos hacer uso de esta técnica para diferenciar zonas dentro de un mismo espacio en las viviendas o locales de concepto abierto, aprovechando las características técnicas de cada material en función del uso. Por ejemplo en cocinas abiertas al salón, o en baños integrados en la habitación, podría ser una buena forma de separar ambos usos. Cabe destacar también la variedad que existe en la forma de combinar los pavimentos, pudiendo hacer degradados, mosaicos o incluso generar un efecto de alfombra para un espacio determinado.